Cielos abiertos y niños descalzos
Luz Marina Almarza
Conocer a esta maravillosa poeta me
lleva a retroceder más de una década en la 1º Bienal de Literatura Orlando
Araujo, en el año 2000, en Barinas. Quién le conoce queda atrapado por su voz
dulce, ojos grandes y pestañas gruesas, como lo noche misma; sus atuendos
largos, igual que su cabellera negra larguísima, muy lisa, imaginándome ver a una princesa del
lejano oriente; y su calidez al acercarse a ti a saludarte, como si te
conociese desde mucho antes.
Al editar Monte Ávila Editores, la preciosa antología de haiku, con tres de sus
libros, “Huésped del Alba, 2006, no dudé en adquirirla de inmediato. Este
volumen de textos obtuvieron una mención en la 2º Bienal Orlando Araujo, 2002;
para mi mayúscula sorpresa es que a mí, de igual manera se me concedió una
mención allí con mi trabajo Vislumbrar el
cielo aún inédito. La poeta, amiga
en afectos y cercana en nuestra forma de poetizar, WafiSalih, me llena de alegria hacer un ensayo sobre sus libros de haiku; tomaere 9 de sus 14 libros de
poesía; pues ambas sentimos, el regocijo por esta forma tan prístina de hacer mágia poetica. Catorce libros de poesía, en poco más de dos
décadas nos habla de un poeta a tiempo completo
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WafiSalih nació en Valera, Trujillo, en 1966. Es
graduada en Castellano y Literatura y
magíster en Literatura Latinoamericana. Se ha desempeñado como docente de la
Universidad Pedagógica de Barquisimeto y ha sido coordinadora de la Casa de la
Poesía Hugo Fernández Oviol y de la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello,
Capítulo Lara. Sus publicaciones incluyen un laureado libro de prosa titulado
El Dios de las dunas. En haiku cuenta con la compilación de tres libros Huésped
del alba (Monte Ávila, 2006), traducido al inglés y francés. En 2009 El Perro y
La Rana.
presentó Cielos Descalzos, un libro de haiku para
niños, y el año pasado Ediciones Parada Creativa publicó Vigilia de Huesos.
Recientemente, la editorial Rotulo ediciones, ha publicado su poemario “Con el
índice de una lágrima”, 2015.
WafiSalih, Poeta intensa, hermosa,
dulce, fiel, como su mismo nombre, incansable en su escritura,que no detiene; no
descansa mucho tiempo entre un libro y otro. Es una poeta que escribe una
poesía sea en prosa, como el Dios de las Dunas,
( ) El perro y la rana. O
los libros restantes es una poesía de extensión breve, de una estrofa, de
versos cortos, que nos da la sensación no del miedo al discurso verbal,
poético, sino más bien, como quién se detiene a medir cada una de sus palabras,
ya sea escrita con sangre, como el poemario citado o el último de su larga
lista, o como otros que son también breves, pero escritos en otro tono, como
quién toma la pluma de un pájaro para escribir con sutileza y libertad cada
verso, sin caer en estridentes gritos, como nos causa el horror de una guerra
sangrienta, en el Lejano Oriente, donde le tocó vivir desde muy niña.
En este trabajo me quiero detener en el haiku como
forma poética muy hermosa, cultivada por ambas; en su lista de libros de poesía
estáncinco:
ü
Huésped del alba
ü
A los pies de
la noche
ü
Caligrafía
del aire
ü
Cielos
descalzos
ü
Vigilia de
huesos
ü
A manera de información, en este
ensayo, -sin ánimo de cansar al lector
atento y curioso-,me permito incluir unas páginas, a cerca de los conceptos del
haiku; a pesar de que hay lectores de poesía que lo conocen, hay un grupo de
lectores que aún no; y de los libros de escritura poética, de esta escritora
reconocida en Venezuela y el extranjero, gracias a la traducción de sus obras
en varios idiomas, el haiku es una forma poética que ella y esta quién escribe
son formas poéticas que manejamos con frecuencia, a lo largo de nuestra
creación literaria.
El haiku
cabe en una gota de rocío
El haiku es,
sin duda alguna, una de las formas más bellas de la literatura
japonesa. Se trata de un poema corto de diecisiete sílabas, distribuidas en
tres versos. Alcanzó su forma actual a finales del siglo XV y debe su nombre al
poeta Shiki (1867-1902). Su estructura y forma
es descriptivo. Como flash que ilumina un instante, casi siempre un
paisaje. El protagonismo se dirige hacia la naturaleza, contemplada en las
diferentes estaciones del año. Estos pensamientos se encadenan con percepciones
de muy diversa índole: nostalgia, humor e incluso religiosos, procedentes estos
de la sabiduría del Zen.
Siendo de una tradición tan antigua el haiku
conserva su forma métrica silábica, de 5 -7-5 y el tanka con dos versos más de
14 sílabas en dos versos pares. No pretendo acá en este trabajo extenderme en
la historia del haiku, pero el haijin o poeta que los escribe no puede
desligarse de la filosofía Zen
La naturaleza y el budismo Zen
Dijimos que el tema fundamental de la
literatura japonesa era la naturaleza. Lo que se comunica en el haiku es la
sensibilidad ante la naturaleza, cómo ver la naturaleza, cómo sentirla. En este
punto la cosmovisión budista es esencial en la creación de Haiku. Destaquemos
una vez más que los primeros poetas de Haiku eran todos budistas, empezando por
Basho. En el mundo budista no existe diferencia entre las plantas, los animales
y los seres humanos. A diferencia del mundo católico, todos estamos en el mismo
nivel. De ahí viene la profunda simpatía que tenemos los budistas con la
naturaleza, y el gran anhelo que sentimos por la naturaleza, especialmente la
naturaleza estacional.
En este aspecto interviene otro factor
importante que también tiene el origen en el budismo: conciencia de lo efímero
de la vida humana.
Al escribir un Haiku-en una forma tan breve se
condensa, como una gota de agua salada,
manifiesta el anhelo de unirse con esta naturaleza cíclica y apropiarse
de una pequeña parte de ella. Los poetas de haiku se vacían a sí mismos. Por lo
tanto, las poesías de Haiku, a primera vista, parecen supremamente objetivas.
Aparentemente, no se distingue la
separación entre un haijin con la naturaleza.
Aquí se podrá señalar la semejanza que existe
entre el Haiku y la fotografía. Pero el
Haiku, en algunos aspectos, es superior a la fotografía. Este corte no se puede
hacer en la fotografía. La luna y el sol, que están en los dos polos opuestos,
no pueden juntarse en una misma fotografía. Se unen en un mismo plano los elementos del
poema, imágenes de diversos tipos, después de pasar por la sensibilidad del poeta
y esta unión se concreta en forma de este haiku maravilloso.
La estética de la cultura japonesa,
que consiste en ese anhelo de unirse a la naturaleza y ese deseo de compartir
el gozo de la belleza natural manifestado magistralmente en las poesías de
Haiku
En
Japón, el analfabetismo es alto; pero gracias a las pinturas que acompañan al
que escribe haiku, niño o adulto, igual vale en estos casos, es frecuente que
ellos escriban a pesar de su condición pues toman de la naturaleza los
elementos cotidianos para escribir; utilizados como sustantivos y adjetivos,
que son las primeras palabras que aprendemos en una lengua para designar,
nombrar las cosas, en cualquier cultura.
Características formales del haiku
El español Vicente Haya
lo describe en cuatro palabras: “asombro
por un suceso”. El poema no lleva título y no debe rimar y debe incluir un
kigo o referencia a la estación o período que involucre al clima (lluvia,
sequía, cosecha, etc.) y un kirijei o referencia al día o la noche. El haijin
encapsula un instante y en tres trazos, en tres versos que contiene un breve
poema, desarrolla un universo en
miniatura, una postal .
La ejecución de estas
tres formas poéticas emplea el uso de la sinalefa y las leyes de acentuación
para el conteo de las sílabas; es decir, si la última palabra del verso es
aguda se le suma una sílaba, si es grave no se modifica el conteo, si es
esdrújula se le resta una y sobresdrújula se le descuentan dos sílabas a la
cuenta.
El haikú suele ser
acompañado por un haiga o pintura de aparente sencillez relacionada
directamente con la temática del poema, aquí vuelve a aparecer Bashō como su
precursor
Otra tendencia reciente,
para la elaboración de los poemas, viene de la escuela inglesa, que suprimen
signos de puntuación como los puntos y las comas y el uso de las mayúsculas con
la finalidad de conferirle la levedad que es su característica, asemejándolo
más a los pictogramas japoneses que no llevan signos de puntuación ni
mayúsculas.. Con esto se infiere que cualquier persona está capacitada para
escribir un haikú siguiendo las instrucciones. Es por ello que en Japón, donde
el analfabetismo es casi nulo, es difícil encontrar a alguien que en su vida no
haya escrito uno.
Por lo descrito
anteriormente, el haikú posee características propias y bien definidas en su
formalidad y temática.
Atendiendo a este
apartado Luis Andrade hace énfasis en el respeto que debe mantener la
estructura como tal con el fin de perpetuarla, tomando como irresponsables
aquellos autores que publican supuestos haikús sin siquiera mantener la
estructura silábica de 5, 7 y 5. Aunque muchas traducciones no nos lleguen de
esa manera, es deber del haijintratar
de ajustarse con fidelidad a lo establecido y, a partir de allí, rendirle
tributo a la inmensidad que se concibe en un instante.
Vale destacar que apenas
realizamos un intento por acercarnos a la esencia misma del haikú, ya que el
originario suele estar imbricado en la filosofía zen y en la concepción que
manejan los orientales de la naturaleza en su esplendor. Podemos conformarnos
con la adaptación de este estilo de poesía a nuestra lengua, cultura y modo de
ver la vida.
Cielos Descalzos
De todos estos cinco libros de haiku,
editados o no, que me ha cedido la poeta gentilmente, para este ensayo quiero
detenerme un conjunto de 14 haiku, denominados Cielos descalzos, en donde quiero detenerme un poco.
Paradeterminarlo, según el
especialista y estudioso en esta poética, Vicente Haya, las condiciones
elementales, pues, no toda estrofa de 5-7-5 se le considera haiku.
La inocencia. Aquella cualidad intrínseca de los niños, que cada día se va perdiendo
más prontamente, quizás por la contaminación en su alma y en su mente del uso
indiscriminado y desmedido de los medios audiovisuales, desde muy temprana
edad. La inocencia nos permite ver al mundo con ojos de niño; maravillarse por
lo sencillo, que por serlo se convierte en extraordinario y maravilloso
“!
En primavera
un burrito
presume
su carga de
flores!
El haiku, por consiguiente, no presume
nunca de palabras complicadas,
rebuscadas ni extensas; al contrario,la poeta utiliza palabras sencillas para describirnos
con ojos claros, los que el haijin, escritor de haiku eso que ve, que le causa
tanto asombro, le deja arrobado mirando, contemplando, que para otros pasa desapercibido; es describir un
microcosmos sin complicaciones ni oscuridades; lo vemos en un niño cuando va de
paseo, todo le asombra, le alegra enorme, y nos lo señala con su dedito
“Titilan para mí
como árbol de navidad
los mangos”
Para ejemplificar algo, el niño siempre usa comparaciones de su mismo
mundo; sin complicarse la mente que no tiene nada de oscura, sino de sincera, y
muestra además la espontaneidad que muchas veces nos hace reír juntos.
Otra cualidad de un haiku, es indicarnos el presente, aquí y ahora, como
ya lo hemos señalado, en los ejemplos, y el uso de una estación, de una
atmósfera, una estación: verano-invierno, sol-lluvia, primavera-otoño,
frío-calor:
“Un caballero
mi gato con bufanda
en el invierno”,
Esta palabra que designa la estación
es lo que los japoneses llaman Kigo.
“Visten las ovejas
del niño en su cama
pijamitas blancas”
Si el niño usa pijamas para dormir, a las
ovejitas que él ve en sus sueños, al adormecerse pues igual, según su lógica de
niño. Si el haiku ha sido catalogado con la simpleza, que no es tal, ni por ser
un poema breve, con apenas 17 sílabas o algo más, con cierta libertad en el
poeta, el niño agrupa, condensa en su mente un mundo propio que el apenas logra describir con franqueza.
“ Una sirenita
galopa en mis sueños
caballitos de mar”
En este hermoso libro de haiku para
niños, Cielos descalzos”, como los niños que corretean por la casa, por el
patio cuando van a jugar, a recoger los mangos del jardín, ella toma prestado
las palabras, que el niño conoce, juega con ellas, porque son sus juguetes que
lo hacen feliz. Cometas, sirenas, caballitos …
“Juegan los niños
piedritas por soldados
les da el camino”
Si un haiku de los cientos o miles que
puedes llegar a escribir te sale así, déjalo estar, consérvalo junto a los
demás y no te obsesiones por cambiarlo.
Pero ni lo busques ni lo exhibas, porque puede llegar a ser una trampa.
Muchas veces,
encontramos en los grupos de internet, personas, poetas que escriben haiku,
porque les fascina, les encanta su esencia, como lo es lo que percibimos
maravillados por los cinco sentidos,
pero la poeta, como niña al fin, se toma la libertad, en estas estrofas que nos
regala para asombrarnos, a unos y otros, las amplitud, de tomar prestadas un
par de sílabas más, de las diecisiete, tomando el ejemplo.
En este
caso, la poeta se vale del recurso, muy bien empleado del diminutivo
“piedritas”y otros como: sirenitas, cangrejito, monito, pijamitas...
A veces se dice, que el mal escritor abusa de los diminutivos, pero en este
caso, el que habla es un niño poeta, ella u otro pudo haberlo escrito,
expresado, y por lo tanto, los elementos, animales u objetos, según los ve, son
pequeños, y no grandes, como lo ven los adultos, que en este libro para niños,
lejos de empalagarnos, nos hacen meternos dentro del libro y sus imágenes,
construidas por él.
“En el cielo
una odalisca de papel
mi cometa”
y este otro, que nos deslumbra
y llena de gracia y comicidad:
“Piedra verde
la iguana parece
un rey viquingo”
Concluyendo, un haiku es
una forma poética que nos llena de asombro, que da para escribir todo el asombro que cabe
un una lágrima, propia de una cultura originaria, lejana y mágica que
heredamos, de la que no podemos desligarnos, - en forma, esencia, temática y
espiritualidad- que no nos deja de apresar, por su forma de ver el mundo, fijarnos
hasta lo placentero de la naturaleza misma.
Cielos Descalzos es un breve libro para niños, de 14 haiku apenas, usada por adultos que se hacen niños, como es
caminar descalzos, ver el cielo lleno de nubes y formas y jugar y soñar con
ellas.
Luz Marina
Almarza Linares.
Barinas,
Noviembre 2015